La iniciativa, bautizada como ‘Sin luz no hay pan’, la ha impulsado la Confederación Española de Panadería, Pastelería y Bollería, Ceoppan. «Se trata de un apagón simbólico ante la complicada situación que vive nuestro gremio y en el que se sumarán muchos panaderos porque estamos todos con el agua al cuello» comenta José María Fernández del Vallado, Secretario General de Ceoppan.
Dentro del plan de medidas acordadas por el Comité ejecutivo de Ceoppan ante la complicada situación que vive el sector, en parte por la subida en las tarifas de la electricidad, se encuentra una acción de choque que se ha denominado “Sin luz no hay PAN” con la puesta en marcha de una convocatoria de apagón de luz el viernes 28 de octubre de 12.00h a 12.15h del medio día. La escalada de precios de la energía y de los insumos está dejando a los obradores sin margen de beneficio y al borde de la ruina, un problema que se ve agravado por otros obstáculos como la falta de relevo generacional.
Los panaderos paran sus hornos y declaran la guerra a los altos costes energéticos: “No hay quien lo aguante”
Las panaderías artesanales apagarán sus hornos en señal de protesta para mostrar al Gobierno y a los consumidores el futuro que le espera al sector si no se toman medidas para combatir el incremento de costes energéticos. El sector panadero está extremadamente atomizado, con una gran dependencia de los costes de energía, materias primas, servicios y transportes que no paran de incrementarse. Ante esta situación muchas empresas cada vez están más ahogadas.
Con este simbólico apagón se pretende que el gobierno y la ciudadanía, en general, sean conscientes de que la panadería es un sector esencial para la sociedad; y que cualquier medida de apoyo que se contemple debe ir destinada también a las microempresas y pymes. Una vez más queda de manifiesto que el sector de la panificación es fundamental para el mantenimiento del modelo de comercio de proximidad característico de pueblos y ciudades. Además, de ser productores de un alimento básico, esencial en la cesta de la compra, como es el pan.
En España aún hay 12.000 locales de fabricación artesanal que dan empleo a 190.000 panaderos. Muchos, advierten desde el sector, no van a poder sobrevivir a la subida imparable de la factura de la luz.
