Hacer una revista es un sueño, editar el primer número es un imposible, pero llegar al 50 aniversario es para felicitar. Y más si cabe, lo es seguir haciéndolo en papel en plena era digital. Siempre es un buen momento para echar la vista atrás y hacer balance de todo lo vivido y aprendido. Pero en una cifra como la que nos ocupa, 50 años de vida, la reflexión es obligada.

Cuando en 1975 se fundó Panorama Harinero, que posteriormente se llamaría Panorama Panadero, seguramente era difícil imaginar que después de cincuenta años la revista sumaría 459 ejemplares y más de 3200 artículos. Sin duda, un hito que representa el mejor indicador de haber alcanzado la expectativa de «continuidad y calidad» que se expresaba en el editorial del primer número publicado en junio de 1975.
Los momentos que configuran la historia de la revista son muchos y pueden recordarse de distintas maneras. Una de ellas es fijarse en las etapas que se han sucedido hasta la actualidad, convirtiendo la publicación en un referente en el ámbito de la panadería y marca de referencia del sector tanto a nivel nacional e internacional. La lectura de los editoriales que, durante muchos años, introduce cada volumen permite identificar estas etapas. Un ejercicio que también pone de manifiesto cómo la historia de Panorama Panadero representa un buen reflejo del proceso de transformación de la panadería. En aquellos años la panadería tenía un carácter muy distinto al que conocemos hoy, una época en la que la producción de pan todavía mantenía tradiciones artesanales, aunque empezaban a notarse ciertos cambios de industrialización. Como se especifica en el primer número, la publicación surge con el objetivo de cubrir un vacío en el campo de la panificación y ser una herramienta útil para el profesional dando respuesta a las inquietudes diarias.

Aunque 50 años puedan parecer poco, un mero instante de tiempo cósmico, para Panorama Panadero han supuesto mucho. Ha dado tiempo a todo, o a casi todo: a diversas transformaciones de estilo y temas, al desembarco de este proyecto informativo en el mundo digital y, más recientemente, a la conquista de las redes sociales. No hay duda de que en estas cinco décadas el propio periodismo ha experimentado una evolución imparable. ¿Quién nos iba a decir que a golpe de click un robot de apellido ChatGpt fuera capaz de escribir una crónica?
No es el caso de Panorama Panadero: nuestro prestigio y reputación se construyen exclusivamente con capital humano. Ojalá dentro de otros 50 años algunas de las personas que hacen posible esta publicación asistan de nuevo al cumpleaños de la revista.