Las empresas que forman parte de la Asociación Española de la Industria de Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac) registran, por segundo año consecutivo, un incremento de la demanda, en esta ocasión, de entre un 3,5% y un 4,5% con respecto al año anterior.
Por segundo año consecutivo las estimaciones de la Asociación Española de la Industria de Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac) sobre la demanda de roscones apuntan a un incremento con respecto al pasado, según datos recopilados por la asociación. La estimación de este crecimiento se cifra entre un 3,5% y un 4,5%, por lo que este año se deduce que se consumirán entre un millón y un millón cuatrocientas mil unidades más respecto al año anterior. Por ello, esta campaña se superará la cifra de 30 millones de unidades consumidas.
La desestacionalización de este dulce típicamente navideño es ya un hecho: “Su consumo se adelanta ya al mes de noviembre en el comercio y en la hostelería. Además, va más allá del mismo día de Reyes, llegándose a consumir a lo largo del mes de enero”, ha apuntado Felipe Ruano, presidente de Asemac.
En cuanto a rellenos nata, crema y trufa siguen siendo las principales preferencias de los consumidores. Por otro lado, este año llaman la atención referencias como el relleno sabor mazapán y otros sabores. Y en cuanto a tamaños, se siguen consumiendo principalmente las unidades medianas (entre 400 y 500 gramos según el fabricante) y grandes (entre 750 y 1.000 gramos).
Por último, el importante crecimiento en el consumo de panetones “no está lastrando el consumo de roscones, lo cual demostraría que, al contrario de lo que puede parecer, no son productos que supongan una competencia directa entre sí”, ha completado Felipe Ruano.