Se acerca la Navidad y la posibilidad de volver a sentirse niño y disfrutar en familia en torno a la mesa. Y de eso saben mucho en El horno de Babette, con su #mesadelpan y la celebración de tradiciones como la del Roscón de Reyes.
«Nuestro roscón es un roscón de cercanía que elaboramos en Navidad. Nosotros no lo hacemos meses antes y congelamos. Como obrador artesano, queremos contribuir a engrandecer esta exquisitez culinaria tan tradicional» dice Beatriz Echeverría, alma mater de El horno de Babette y responsable de que su roscón se coloque cada año entre las listas de los mejores de Madrid.
El horno de Babette prepara esta elaboración tan tradicional usando métodos artesanos e innovadores para ensalzar el lugar que ocupa en nuestra cultura.
El Roscón de Babette está elaborado con mantequilla de verdad, sin aceites, para resaltar todos los aromas que esta aporta. Los huevos y la harina son ecológicos, lleva levadura de panadero y masa madre. Rallan la piel de la naranja a mano porque en este obrador no se utilizan aromas artificiales. El proceso de elaboración es lento, con un amasado poco agresivo y una fermentación que incluye el plegado de la masa para darle fuerza de manera natural, sin aditivos químicos.
El mismo cuidado dedican a la decoración. Solo usan naranja ecológica que confitan en la casa con un método innovador en frío para conservar su jugosidad e intensidad aromática. Y la acompañal azucarillo tradicional hecho por ellos mismos, que casi no se encuentra ya artesano por su compleja elaboración.
Estarán disponibles en todas sus tiendas los sábados y domingos desde primeros de diciembre.
El roscón de Babette es conocido por su formato redondo en molde, que ayuda a conservar la jugosidad de la miga y lo hace único en la capital, con una estética innovadora y al mismo tiempo tradicional. Es resultado del trabajo de muchos años en esta panadería que ya lo preparaba para sus alumnos en 2008, cuando nació como centro de formación y que comenzó a elaborarlo para sus clientes en 2013, cuando se convirtió en panadería.
En El horno de Babette quieren que la experiencia de llevarte un roscón a casa sea redonda, así que todo está pensado. La sorpresa es una pieza delicada, trabajo de la ceramista madrileña Bárbara Acosta, que las corta y esmalta a mano una a una, y van acompañadas de un cordel para que los más pequeños puedan colgarlas del árbol. La caja, cuadrada y alta, está ilustrada por Juliana Salcedo, con un recorrido del proceso del roscón. En cada caja encontramos un tarjetón, también ilustrado por Juliana, que nos presenta este pan festivo.
Los roscones estarán disponibles en las tiendas de El horno de Babette durante todos los fines de semana de diciembre, a excepción del 25 y el día 1, a un precio de 28,40€ el medio kilo, aunque algunos afortunados podrán encontrar los primeros ya en noviembre. Esto está pensado para que sus clientes puedan disfrutar de ellos no sólo la tarde del 5 de enero, porque, aunque adscrito por tradición al día de Reyes, hay quienes quieren disfrutar de este postre desde semanas antes de esa fecha.